Hace poco ocurrió una terrible tragedia en un colegio de la región alemana de Winnenden, un chico llamado Tim Kretschmer asesinó indiscriminadamente a 16 personas y luego se suicidó. Hasta ahora se desconocían los motivos que le impulsaron a cometer semejante acto, pero recientemente se ha descubierto la verdadera causa. Se trata sin ninguna duda del videojuego Far Cry 2, un título que provocó el desequilibrio mental del joven y por tanto es el auténtico culpable del asunto. Lo que son las cosas, lo teníamos delante y no lo habíamos visto.
Evidentemente hablo en tono irónico, pero este razonamiento absurdo ha sido publicado en el Times y proviene del teniente-coronel Dave Groosman, un profesor de psicología de West Point. Este personaje dice que se puede ver la influencia de los juegos violentos en la forma en que los asesinos de escuelas apuntan y disparan con precisión, aparte de atacar a una víctima u otra sin ningún patrón.
Por algún motivo que desconocemos el señor Grossman sigue teniendo una opinión de peso en estos temas, pero afortunadamente otras personas difieren por completo de semejante afirmación, como por ejemplo el sociólogo Walter Hollstein del Consejo Europeo. Explica que han podido incluir múltiples factores tales como la falta de ayuda, rabia y pérdida de control, y que todo ello junto ha podido desencadenar la tragedia, pero que los videojuegos en sí mismos no transforman a nadie en un asesino.
Si os estáis preguntando que narices pinta Far Cry 2 en todo esto la respuesta es sencilla, se ha sabido que Tim Krestschmer jugó a ese juego la noche antes del incidente, y además empleó una Beretta 92, un arma que aparece en el juego. Con semejantes “pruebas” algunos lo tienen claro, Far Cry 2 es culpable.
Bueno, en primer lugar el padre del chico poseía una colección de 15 pistolas y rifles, y llevaba a su hijo a prácticas de tiro desde que tenía 8 años. El joven cogió la Beretta porque era la única arma que no estaba bajo llave en ese momento, así que nada tiene que ver el arma del Far Cry 2. Si disparó con precisión es porque sabía disparar ya que había practicado desde hace años, asi que nada tiene que ver el juego. Por mucho que juguemos a un shooter si nos dan un arma y no hemos disparado nunca no tenemos ni idea de hacerlo, punto. También se conoce el hecho de que el joven secuestró un coche al igual que se hace en Far Cry 2, pero relacionar una cosa con otra es verdaderamente ridículo. En cuanto a lo de disparar de forma indiscriminada a la gente como se hace en los shooter debemos saber que la mayoría de víctimas fueron mujeres, así que quizás no fue algo tan indiscriminado.
Lo cierto es que no se sabe por qué el chico cometió semejante acto, ni lo sabremos nunca, pero es increíble que a estas alturas sigamos con las mismas tonterías de siempre. Los videojuegos no tienen la culpa ni jamás la han tenido, y en los rarísimos casos que hayan causado algún incidente los culpables son indudablemente las personas. No se ha podido demostrar que los juegos violentos ejerzan alguna influencia negativa en la gente, si hubiese sido así tened por seguro que la noticia se habría difundido hasta en la Luna.
Vía: Nivel22
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